Mostrando entradas con la etiqueta 1º bach. Literatura universal. El ensayo.T.4.. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta 1º bach. Literatura universal. El ensayo.T.4.. Mostrar todas las entradas

viernes, 21 de agosto de 2020

1º BACH. LITERATURA UNIVERSAL. EL ENSAYO EN LA ILUSTRACIÓN. VOLTAIRE. TEMA 4





Lee atentamente el fragmento de Voltaire y contesta:
 

Elogio histórico de la Razón


En el siglo XVI Erasmo hizo el Elogio de la locura. Vosotros me ordenáis que os haga el elogio de la Razón. Vemos que esta Razón efectivamente no es elogiada hasta doscientos años después que su enemiga; y hay naciones en las cuales todavía se la desconoce.
En el tiempo de nuestros druidas
1, la Razón era tan desconocida en nuestra tierra que ni siquiera tenía nombre en nuestra lengua. César no la introdujo ni en Suiza, ni en París, que por aquel entonces no era más que una aldea de pescadores, y él mismo apenas la conoció. Aquel magnánimo insensato salió de nuestro país devastado para ir a devastar el suyo y para hacerse asestar veintitrés puñaladas por otros veintitrés ilustres furibundos que no le llegaban ni a la suela del zapato.
El franco
Clodoveo llegó alrededor de quinientos años después para exterminar una parte de nuestra nación y sojuzgar a la otra. No se oía hablar de Razón ni en su ejército, ni en nuestros desdichados villorrios, a no ser de la razón del más fuerte. Durante largos años malvivimos en esta degradante barbarie. Las Cruzadas no nos sacaron de ella. Fueron a un tiempo la locura más universal, la más atroz, la más ridícula y la más infortunada. La Razón se ocultaba en un pozo, junto con la Verdad, su hija. Nadie sabía dónde estaba este pozo; y en caso de saberlo hubieran bajado a él para degollar a la hija y a la madre.
Una vez los turcos hubieron tomado Constantinopla y redoblado las espantosas desgracias de Europa, dos o tres griegos en su huida cayeron en este pozo, o más bien en esta caverna, medio muertos de cansancio, de hambre y de miedo. La Razón los acogió humanitariamente. Recibieron de ella un pequeño número de instrucciones, porque la Razón no es prolija
2. Les hizo jurar que no revelarían el lugar de su escondrijo. Partieron, y después de mucho andar llegaron a las cortes de Carlos V y de Francisco I. Incluso fueron recibidos por el emperador y por el rey de Francia, quienes les dedicaron una ojeada al pasar mientras se dirigían en busca de sus amantes. Pero su esfuerzo fructificó en las pequeñas ciudades, donde encontraron a buenos burgueses que aún conservaban, no sé cómo, algún vislumbre de sentido común.
Estos débiles fulgores se extinguieron sin duda en Europa entre las guerras que la asolaron. Dos o tres chispas de razón no podían iluminar al mundo en medio de las antorchas ardientes y de las hogueras que el fanatismo encendió durante tantos años. La Razón y su hija se ocultaron más que nunca. No obstante, algunas semillas de los frutos que siempre llevan consigo, y que habían esparcido, germinaron en la tierra, e incluso sin pudrirse.
—Hija mía —decía la Razón a la Verdad—, creo que nuestro reinado podría empezar a ser efectivo después de nuestra larga prisión. Ya veis que todo llega tarde; había que pasar por las tinieblas de la ignorancia y de la mentira antes de volver a vuestro palacio de luz, del que se os ha mantenido alejada juntamente conmigo durante tantos siglos. Nos ocurrirá lo que le ha ocurrido a la Naturaleza: que ha estado cubierta por un maligno velo y completamente desfigurada durante incontables siglos. Por fin llegaron un
Galileo, un Copérnico, un Newton, que la mostraron casi desnuda, haciendo que los hombres se enamoraran de ella. Ahora veo que desde hace diez o doce años en Europa se dedican a las artes y las virtudes necesarias, que suavizan la amargura de la vida. Vos, que nunca habéis podido mentir, decidme qué época hubierais preferido a esta para echar raíces en Francia. Gocemos, pues, de tan buenos tiempos; quedémonos aquí, si duran; y si se repiten las tempestades, volvamos a nuestro pozo.


Voltaire
Novelas y cuentos, Planeta


1druida: en la antigua Galia, miembro de la casta sacerdotal.

2prolijo: excesivamente largo o minucioso.


  • ¿Qué parentesco une la Razón a la Verdad?

  • ¿Qué pretende sugerir el autor con ese vínculo?

  • ¿Qué figura retórica emplea reiteradamente Voltaire?


Actividad 2

Busca información sobre los personajes y hechos históricos subrayados y elabora un eje cronológico en el que se sitúen los periodos históricos a los que se refiere Voltaire a partir del segundo párrafo.

Actividad 3

¿En qué etapa la Razón encuentra por primera vez, aunque tímidamente, cierto desarrollo?


¿A qué grupo social aparece vinculada?



 





Actividad 4

El siglo XVIII se conoce como Siglo de las Luces. Identifica en los dos últimos párrafos del texto expresiones en las que la Razón se asocia figuradamente a la luz.






Actividad 5






El prestigio de la Razón corre en paralelo al desarrollo científico. Localiza en el fragmento el pasaje en el que se plantea esta idea.






Actividad 6






¿Qué opinión le merece a Voltaire su tiempo con respecto a épocas anteriores? Argumenta tu respuesta citando frases del texto.


 

LA LITERATURA UNIVERSAL EN LA EDAD MEDIA. TEMA 2. 1º BACHILLERATO

     ÍNDICE: LOS LÍMITES DE LA EDAD MEDIA  LA CULTURA MEDIEVAL LA LITERATURA MEDIEVAL LA ÉPICA MEDIEVAL ELCICLO ARTÚRICO EL ROMAN COURTOIS L...